miércoles, 22 de junio de 2016

El primer amor


Fue un domingo de 1974 cuando Fernando salió por la puerta de su casa corriendo calle abajo, como si llevara el diablo dentro. Llegó sin aliento a casa de María mientras las campanas de la iglesia llamaban a misa, llamó a la puerta y nadie contestó.

La tarde anterior María y él se habían besado en el guateque que había organizado la pandilla. Quedaron para el día siguiente y al despedirse, ella le prometió un segundo beso.

Volvió a llamar y entre los visillos de una ventana de al lado, se oyó una voz que decía: “¡ No están, volverán el verano que viene!”.